"Siempre me gustó relacionarme con los demás y eso es muy importante en nuestra función, más allá del profesionalismo."
Miembro del equipo profesional de FAMILIA Acompañantes
Hay una frase que dice elige un trabajo que te guste y ese día dejarás de trabajar. Ese es el espíritu que llevó a Hiber de Los Santos a integrar el equipo profesional de FAMILIA Acompañantes. No fue sencillo, pero él asegura que cuando uno sabe lo que quiere, hay que buscarlo aunque cueste.
Hiber es del interior y vivió en Artigas por más de 40 años. Ahí se educó, formó una familia, creó un negocio que le permitió pagar las cuentas y, cuando sus hijos se independizaron, se planteó nuevos objetivos.
"Siempre me gustó relacionarme con los demás, creo que lo mío es el trato con otras personas. Todos los trabajos que tuve incluyeron las relaciones sociales y nunca me costaron; al contrario, es algo que se me da fácil y me gusta."
Se mudó a Montevideo buscando estar más cerca de sus hijos, y su hermana lo animó a seguir su vocación. "Por suerte todo salió muy bien. Creo que fue fundamental la facilidad que tengo en el trato personal porque, más allá del profesionalismo en asistencia sanitaria, sin ese perfil te falta lo más importante. Además, si te gusta lo que hacés, nunca lo sientes como un trabajo".
Hiber considera que cuidar a otras personas es una responsabilidad que exige seriedad, seguridad y esfuerzo. El desafío de todo acompañante es doble: por un lado, el compromiso humano y personalizado. Por el otro, el respeto y la ubicación que siempre debe primar en la relación.